Guillermo Coronado Céspedes

Kattya Arroyo y La Olimpiada Costarricense de Filosofía.

Un esfuerzo paradigmático


  1. Kattya Arroyo Guerra, un claro ejemplo de vocación docente, que logra aglutinar a un grupo de colaboradores, tanto profesores universitarios como de secundaria, y también estudiantes avanzados de las carreras de Filosofía y Enseñanza de la Filosofía, al servicio de la participación de jóvenes estudiantes de la educación secundaria de nuestro país en las Olimpiadas Costarricenses de Filosofía (OCF), como eslabón previo a la International Philosophy Olimpiad (IPO).

    Un esfuerzo enorme ya con diez años de historia y que resiste los embates de las dificultades económicas, logísticas y hasta la pandemia de la década de los veinte. Un empeño a favor de los estudiantes adolescentes de la secundaria, que refleja un desarrollo natural a partir de la especialización de la Prof. Arroyo en la formación filosófica de los niños. Una pionera en ambos casos.


    Autor/ Author

    Guillermo Coronado Céspedes Universidad de Costa Rica


    Correo: gmocoronado@ yahoo.com


    Recibido: 10/10/24 Aprobado: 05/11/24 Publicado: 16/12/24

    Del gran número de colaboradores que se citan en el informe a que nos referimos en estas líneas, me interesa destacar a dos, Jackeline García y Luis Diego Cascante, porque los conocí en las aulas de la Escuela de Filosofía de la U.C.R. y desde esos tiempos manifestaban su profundo compromiso con la Filosofía pero también con la docencia como la herramienta para extender el alcance de las perspectivas filosóficas en nuestro medio. Pero el informe de la Prof Arroyo nos cita muchos otros casos más. No solamente de profesores de secundaria sino también universitaria, así como un destacado grupo de autoridades universitarias que han sido de enorme importancia para el inicio, mantenimiento y crecimiento del programa de las OFC, y su presencia en las OPI durante esta década.

  2. Una muestra del enriquecimiento del programa en los diez años de su existencia. El documento sobre los diez años de existencia de las OCF nos muestra un análisis de las poblaciones estudiantiles que año con año participaron en las pruebas correspondientes. Número total de estudiantes, colegios de procedencia, resultados de los ganadores en cada nivel de


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    premiación y los dos escogidos para la IPO del siguiente año. Y tales tablas de datos evidencian el sostenido crecimiento del número de estudiantes participantes así como de las instituciones educativas correspondientes. No obstante, llama poderosamente la atención, la ausencia o casi nula participación de las cinco instituciones que iniciaron la educación media en nuestro país, en la segunda parte del siglo XIX, en Cartago, y luego en San José (dos), Alajuela y Heredia. El Colegio de San Luis Gonzaga de Cartago participa solamente en una ocasión con dos estudiantes. Por otra parte, es muy llamativo el esfuerzo de estudiantes de instituciones que no ofrecen filosofía como asignatura en sus planes de estudios y sin embargo se interesan por participar y lo logran. En tal logro son muy importantes los profesores que los apoyan y hasta acompañan el día de las competencias en la OCF. Docentes de otras especialidades pero que consideran importante no dejar solos a sus estudiantes en sus aspiraciones. Estudiantes que por distintas razones se interesan por el filosofar y se esfuerzan por vencer dificultades mayores que las de los estudiantes de colegios que sí tienen a la filosofía como asignatura. Y lo logran como se señala en el caso del ganador de la primera Mención de Honor en la IPO del 2018. Como apuntaremos más adelante.

  3. Una experiencia docente que se enfrenta al fenómeno de la pandemia y no

    solamente sobrevive sino que se fortalece, pues se crea un programa adicional, el Club Filosófico. Una experiencia virtual para no dejar pasar la oportunidad de atraer estudiantes interesados por cuestiones filosóficas, dado que la suspensión de actividades a nivel local y mundial fue casi total. Y como consecuencia de la cancelación de la OCF del 2020. Se emplea la conexión por redes, Zoom y otra plataforma, para que los estudiantes de décimo, undécimo y duodécimo año participen en una formación- cuatro sesiones temáticas sobre Existencialismo, Pragmatismo, Idealismo y Materialismo, e intercambio sobre dichos temas filosóficos, que culminarían en una competencia afín a la de la OCF. Y no solamente fue un éxito con casi 70 estudiantes participantes, sino lo que es más llamativo se ha mantenido como una actividad complementaria cuando las OCD e IPO se reanudaron a partir del 2019.

  4. Aunque mi contacto con las OCF ha sido muy esporádico dado que su existencia coincide con mi retiro de la actividad universitaria por motivos de salud, puedo, con gran satisfacción que puse mi “granito de arena” en la preparación de Luis Ángel Meza, puesto que pude tener su visita a mi casa y sostuvimos largas conversaciones sobre los temas de mi especialidad. Conversaciones de gran nivel dado su interés y su capacidad analítica. Asistió a la IPO del 2018, y obtuvo la primera Mención de Honor para nuestro país. A su regreso tuvimos el enorme placer de su asistencia a las sesiones académicas del Círculo de Cartago y se destacó por su pensamiento analítico de gran nivel. Lamentablemente al Círculo también lo afectó la crisis de la pandemia y hemos tenido que emigrar al trabajo a distancia y se cortaron esas sesiones presenciales que se remontan a 1956, fecha de su fundación. Esperamos el próximo año volver a la presencialidad y por supuesto invitaremos a nuestro joven amigo del Círculo, Luis Ángel Meza.

Se debe reconocer que en la corta existencia de las OCF, a partir del 2018 se ha obtenido una Medalla de Bronce, 2021, por Yared Alemán Saborio, y otra Mención de Honor, 2023, por Fernando Méndez Castellanos y en Grecia. Nótese como en la


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última mitad de la década, el programa de las OCF muestra una madurez creciente. Para finalizar un profundo reconocimiento a la Prof. Arroyo, a sus cercanos colaboradores tanto profesores universitarios como de secundaria, a los estudiantes que han ganado en dichas justas filosóficas, y lo que no debe olvidarse, a todos los que han participado en ellas. Tengan por seguro que las habilidades aprendidas por su contacto con el quehacer analítico de la Filosofía los acompañarán siempre,

cualesquiera que sea la actividad escogida para su realización personal.


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