Xally Verónica Vázquez Valverde | Leobardo Armando Ceja Bravo
RESUMEN Uno de los aspectos irrenunciables a los que el diseño se debe es el del entendimiento y las interacciones que de él se puedan esperar, necesitar o disfrutar. Cuando el diseño se vincula a una experiencia museística es importante que el diseñador logre entender, las diversas intenciones comunicativas implicadas en lo que será la exposición; en búsqueda de la experiencia, el diseñador requiere trascender la información y los cánones establecidos, por lo que la investigación será un proceso de búsqueda y descubrimiento, el cual deberá mostrarse y ser percibido por los espectadores. En esta oportunidad se presentan los resultados de la investigación realizada a partir del estudio y sistematización de información obtenida por la participación de cuarenta estudiantes, diez por cada uno de los semestres que integran la Licenciatura en Diseño Ambiental y de Espacios, de la Facultad de Diseño de la Universidad De La Salle Bajío, México. Se propusieron y adaptaron diversas herramientas de | ||
Autores/ Authors Xally Verónica Vázquez Valverde. Universidad de Lasalle Bajío, León, Guanajuato, xallyvazquez@ gmail.com | Leobardo Armando Ceja Bravo. Universidad De La Salle Bajío (León, Guanajuato, México). ORCID ID: 0000-0001-5766-2660, leobardoarmandoceja-bravo@gmail.com Recibido: 01/12/21 Aprobado: 16/02/22 Publicado: 19/12/2022 | investigación, como lo fueron unos lentes que indicaran con apuntadores LED el área de fijación de la mirada; el uso de cámaras de video como forma de seguimiento ocular y del recorrido realizado, los transectos y el registro y medición de las distancias promedio. Palabras Claves: Configuración espacial, vivencia espacial, diseño museístico, observador de segundo orden, análisis espacial. Abstract:The basic interest of the reflections expressed in this document, arises from the intention to establish conceptual constructs that identify the link between what is known as the theory of knowledge and its non-separable relationship with respect to prefigurations. In other words, we talk about the immanent relationship between epistemology and design, because the sociohistorical experience around of such area |
of knowledge in Mexico, makes it clear that when the generation or treatment of certain knowledge is concerned, the design through its specialists establishes their constructs in function of a pragmatism that forces, generally, to retake certain existing knowledge in the interest of the resolution of specific problems without the need to institute new or innovative theorizations or forms of knowledge that favor as a way of overcoming, what Luís Morales Rodríguez calls the design crisis and of its .
observer, spatial analysis.
Contar dentro del contexto de Universitario con un museo en una primera instancia podría parecer una acción ostentosa y cuyas implicaciones sobrepasan las actividades fundamentales del quehacer educativo, pero esta primera afirmación resulta completamente fuera de lugar, engañosa y con ciertos peligros en su enunciación. Lo que se quiere hacer notar en este primer comentario estaría centrándose en el valor que tiene contar con un museo universitario y en este sentido, el MiM (MiMuseo) es un espacio configurado dentro de la Universidad De La Salle Bajío, en la ciudad de León, Guanajuato, México, y con este espacio se busca contribuir en la reflexión, el diálogo y el aprendizaje significativo orientado a través del arte, es decir, a través de sus exposiciones y las actividades que habitualmente son llevadas a cabo en dicho recinto.
Como toda obra lasaliana, este espacio nace inspirado por la herencia de Fe, Fraternidad y Servicio. Su vocación es artística, cultural y educativa, mediante el trabajo orientado a cumplir su misión, la cual centra sus esfuerzos en:
[…] identificar, rescatar, promover y desarrollar la cultura del Estado de Guanajuato, en su patrimonio tangible e intangible, a través del estudio, exhibición, producción y compilación de acervo de diferentes evidencias de arte popular, artes visuales, del diseño en todas sus ramas y la arquitectura, que permitan discursos en los que el espectador obtenga argumentos para reflexionar sobre la búsqueda y desarrollo de sus modos de identidad con dicha cultura, para poder incidir positivamente en su entorno cotidiano. (Universidad del Bajio bajio.delasalle.edu.mx/servicios/mim_mim.php).
Imagen 1. Vista general exterior del MiM. Fotografía: Acervo personal, 2018.
La investigación que se presenta en esta oportunidad se encuentra enmarcada dentro de la línea de trabajo denominada Espacios facilitadores y experiencias en contextos humanos. Su objetivo es investigar las distintas formas de interacción humana, dada en distintos espacios configurados, y cómo éstos influyen en mayor o menor medida para maximizar la experiencia, es decir, pensarlos en términos de interacciones, emociones y vivencias, recuperando la intención, el valor, aporte y voz que la persona tiene.
La importancia de esta investigación radica en aproximarse sería y sistemáticamente con herramientas que contribuyan en la investigación, reflexión y el análisis vivencial de los espacios, entornos y ambientes, tanto configurados, como próximos a configurar, al tiempo que ello implica asumir explícitamente un compromiso de que toda acción y búsqueda humana, mediante el aporte del diseño esté enmarcada en contribuir con el buen vivir.
En este tenor, este trabajo debe considerarse experimental. Su objetivo es generar nuevos conocimientos en relación con la valoración espacial de los estudiantes de Diseño Ambiental y de Espacios, por lo que el objetivo está centrado en comparar el recorrido visual y espacial del alumno de la carrera de Diseño Ambiental y de Espacios, mediante el uso de lentes con apuntadores LED; para obtener alto detalle de cómo se desenvuelve en el espacio. De manera que se pueda observar la evolución de la percepción visual y espacial del alumno dependiendo del semestre que se encuentre cursando.
El punto de partida para el entendimiento de la espacialidad realizada en el contexto museístico deberá considerar la forma en que los visitantes perciben y responden a diferentes tipos de ambientes al interior del museo mediante una exposición, a nivel ambiental, ha recibido por parte de la investigación y hasta hace poco tiempo, una atención relativamente escasa. Una limitación en el avance de la investigación en esta área ha sido la escasez de métodos para cuantificar y analizar las percepciones de los visitantes en la exposición, más allá de las simples y consabidas medidas de evaluación de la satisfacción del usuario.
Por ello, la museología puede ser considerada como la ciencia del Patrimonio,
abierta siempre a una pluralidad de formas museográficas. Los museos de sitio y las presentaciones espectáculo suponen diferentes intentos de integrar a los visitantes dentro de la realidad museística, con el objeto de que se impliquen personalmente y tomen conciencia de la importancia que tiene el conservarlo y protegerlo.
Para que esto suceda, el usuario debe comprender el espacio como tal, por lo
que es necesario entender cómo percibe el espacio museográfico.
El sujeto de estudio en este caso es el estudiante de Diseño ambiental y de Espacios que a diferencia de alumnos de otras carreras universitarias es educado para entender el espacio de tal manera que pueda manipularlo y comprenderlo a profundidad. Al tener una concepción diferente de lo que es el espacio su interacción con el mismo suele estar marcado porque detecta detalles que otras personas pasarían por alto. De esta manera al utilizar los “Lentes con apuntadores LED” (ver imagen 2) para observar como el alumno se desenvuelve en el espacio. Específicamente el recorrido del participante. Paralelamente este estudio ayudará a observar si existe una evolución, o en dado caso una diferencia de la interacción con el espacio entre los alumnos de Diseño Ambiental y de Espacios conforme a su nivel académico.
Imagen 2. Participante utilizando los lentes con apuntadores LED. Fotografía: Acervo personal, 2018.
El carácter figurativo de la exposición contribuye a que se reconfigure un discurso que posibilita un tipo interacción, diálogo y reflexión dado entre la obra y el espectador, pero que está mediado por la museografía y todos los recursos argumentativo-empleados para tal fin. Todo ello en conjunto buscar dar cuenta de las posibilidades y vivencias de las personas en relación con el sitio, es decir, el espacio configurado mediante una lógica argumental, narrativa y/o discursiva logran mostrar la experiencia previa del participante, así como de las formas de interacción e interrelación que establece con la obra y sus posibles lecturas.
Luis Cardoza y Aragón (1988) afirma que: “Según Mondrian “[…] si no evoca en el espectador la sensación, por ejemplo, de la luz del sol o de la luna, de la alegría o la tristeza, o cualquiera otra determinada sensación, uno no ha logrado establecer
belleza universal, no es uno puramente abstracto.” (20) En este tenor, el diseño museográfico debe contribuir y potencializar ese efecto vivencial en el espectador, en el caso particular, la implicación formativa del estudiante de Diseño Ambiental y de Espacios, resulta fundamental que se identifique como potencia interna (motivación o pulsión interna) y que se muestre como potencia externa (motivación o pulsión externa, expresiva, actitudinal), es decir, se alude a una suma de decisiones, estímulos expresados en la forma en la que se ha dispuesto la obra, así como con los diversos sentidos tanto explícitos como implícitos imperantes.
Existe una implicación perceptual regida por el espectador/participante, agudizada por una lógica museística, internalizada con antelación por el museógrafo, este en su carácter interpretativo-discursivo, el cual logra organizar a través de la obra expuesta.
El sentido interpretativo está dado por el espectador/participante, por ello es fundamental, además de necesario aproximarse a él y a sus percepciones y vivencias para encontrar parámetros subjetivos que en su frecuencia de repetición puedan o no evidenciar aspectos/rasgos objetivos dados a partir de la lógica discursiva de la museográfica en su dimensión comunicativa y de mediación en la recepción de los mensajes implicados, tanto en las obras como en la disposición de éstas y la información complementaria existente en la exposición.
Por tanto, la percepción visual es una característica que hace de la Visión el sentido preeminente en la especie humana es la externabilidad, entendida como capacidad de detectar estímulos y/o objetos a distancia, sin requerir contacto entre el objeto o espacio físico y el observador.
De acuerdo con Arnheim (2008) la percepción realiza a nivel sensorial lo que en el ámbito del raciocinio se entiende por comprensión. La vista del cada uno de los hombres se anticipa a la capacidad de otros para hacer esquemas que interpreten válidamente la experiencia mediante la forma. Por lo que podemos decir que ver es comprender.
De igual modo la Proxémica deberá ser entendida como el uso del espacio personal, es decir, el espacio que rodea nuestro cuerpo. Esto nos permite crear posibilidades de interacción en distintas dimensiones espaciales, que expresan diferentes significados, dependiendo del comportamiento que se presenta en cada una, los cuales responden a un complejo sistema de restricciones sociales, relacionado con el sexo, la edad y la procedencia social y cultural de las personas.
Según Edward T. Hall (2003) existen cuatro zonas de distancia en el ser humano. Distancia íntima: esta implica una distancia entre 15 y 45 cm, aunque en su etapa cercana comprende el contacto entre individuos, este tipo de distancia se presenta en individuos que mantienen una relación más estrecha, ya sea familiar o sentimental. En caso contrario, por ejemplo, en el metro y los autobuses, personas extrañas unas a otras se ven a veces envueltas en relaciones espaciales que normalmente se clasificarían entre las íntimas, pero tiende a usar procedimientos defensivos que
suprimen la intimidad del espacio íntimo en el transporte público.
Distancia personal: esta distancia comprende desde los 46 cm a los 1.20 m., este tipo de distancia se presenta comúnmente en conversaciones con amigos o compañeros de trabajo. Como ejemplo ergonómico si se estira un brazo se podría
tocar al otro individuo involucrado.
Distancia social: esta distancia comprende entre 1.20 m. y 3.60 m. se puede definir como la distancia que nos separa de los extraños o desconocidos, se utiliza con personas con las que no se tiene algún tipo de relación cercana.
Distancia pública: es considerada a partir de los 3.60 m. es la distancia que se utiliza para dirigirse a un grupo de personas, en discursos o apariciones en público. En esta distancia las interacciones son las más superficiales, donde la vista y la voz forman parte importante del proceso de comunicación debido a la distancia.
Las distancias personales están muy condicionadas por el entorno en el que se desarrolla la acción, por lo que estas se adaptan dependiendo en donde se encuentre el individuo y son mejor conocidos como radios de acción, los cuales están relacionados con diversos espacios los cuales van desde lo íntimo hasta el público.
Espacio corporal: Éste es el espacio íntimo y sólo está ocupado por personas con
mucha confianza.
Espacio de interacción: Se da en lugares donde se interactúa con otras personas, como colegios, centros médicos.
Espacio habitual: Lugares de congregación, tales como los restaurantes. Esta distancia puede verse acortada a muy pocos centímetros, pero la toleramos ya que tiene lugar en un espacio público y compartido.
Espacio público: en la calle, en el metro, en el aeropuerto. La distancia entre personas no cumple ninguna función en concreto.
Imagen 3. Esquematización de los tipos de distancias, retomado de Edward T. Hall (2003).
Propuesta personal de los autores.
Dentro de este contexto, la observación del arte el museo reviste de gran importancia ya que dicho espacio se ha conceptualizado como un espacio de observación, existe una manera de observar el arte el cual ayuda a comprender los detalles, la narrativa y las intenciones del autor para con la obra.
Es una metodología de diez pasos (Candas, 2009/2010) que a continuación se enuncia:
Identificar: estilo de la obra, autor y época (año o siglo).
Tema de la obra: determinar si pertenece a un tema en especifico (religioso, histórico, mitológico, retrato, costumbrista, bodegón, paisaje, etc.). observar si aparecen figuras en la obra, su posición dentro de el cuadro, qué rodea al objeto, que es lo que hacen las figuras, etc.
Época de la historia: identificar si el cuadro pertenece a la realidad de la vida de la época, o si fue inventada por el autor. Nivel social de los protagonistas del la obra, su vestimenta. Elementos del paisaje natural o urbano que se encuentran en la pintura, identificar si pertenecen a una fecha histórica y lugar de origen.
Formas y volúmenes: observar si las figuras representadas son realistas
o por el contrario se han alterado formas, proporciones, actitudes, etc.
Observar si los contornos de las figuras están poco o muy marcados.
Perspectiva: comprobar, si el cuadro tiene profundidad. Si las figuras van empequeñeciéndose a medida que se alejan del espectador. Si los colores y las formas se han difuminando a medida que se acercan al fondo del cuadro. Si los contornos se van haciendo más borrosos a medida que se dejan del primer plano.
Composición: observar la distribución de las figuras y sus movimientos. Observar el tipo de líneas que se utilizaron en la obra. Comprobar si las figuras del cuadro se pueden agrupar dentro de una forma geométrica (círculo, cuadrado, triángulo, etc.).
Color: determinar que tipo de color predomina dentro del cuadro, ya sean colores obscuros, claros, la cantidad de colores, son colores alegres o tristes, etc.
Luces y sombras: observa si todos los objetos de la obra están iluminados con la misma intensidad o forma. Identificar de donde proviene la luz y en qué posición, y si es natural o artificial.
Técnica: que material fue utilizado por el artista (oleo. Temple, fresco, acuarela, acrílico, etc.)
Opinión personal: la valoración de la imagen, tomando en cuenta los puntos anteriormente mencionados; u otra cosa que se desee añadir al comentario.
De lo anterior es posible establecer e identificar ciertas implicaciones relacionadas con la percepción espacial y museográfica, para lo cual primeramente habrá que establecer que la percepción implica el proceso de conocer el ambiente físico inmediato a través de los sentidos. Comprende el almacenamiento, organización y reconstrucción de imágenes de las características ambientales que no están a la vista en el momento. La percepción proporciona información básica que determina las ideas que el individuo se forma del ambiente, así como sus actitudes hacia él. (Holahan, 2000, 43-68).
Imagen 4. Vista de la sala de exposiciones 1. Fotografía: Archivo personal.
Al momento de observar a las personas tiende a identificar los objetos con mayor facilidad en ambientes ordenados (coherentes), que en ambientes desordenados. Por lo que se llega a la conclusión de que el objeto-espacio guardan una estrecha relación para que la persona los identifique.
El espacio debe experimentarse de distintas perspectivas para llegar a comprenderlo totalmente, por lo que la percepción se podría definir como una exploración más que una simple observación.
Desde el punto de vista del diseño ambiental y de Espacios un elemento fundamental a considerar está en el estudio, identificación e impacto de los factores ambientales, por tanto, la valoración de la luz como un componente dentro de la experiencia museográfica, es un factor indispensable para que el usuario pueda percibir el espacio de manera óptima para que pueda entender de manera precisa tanto el recorrido como la intención de la obra.
La buena instalación y el adecuado montaje deben apoyarse en un escrupuloso diseño y planificación. Su mejor presentación depende en gran medida de los medios tecnológicos y didácticos empleados, en función de una rentabilidad sociocultural de las piezas expuestas y del programa museológico global. También de la buena aplicación de medidas de conservación depende la vida de los bienes. Y los nuevos sistemas de iluminación que se basan en la representación escénica.
Una vez analizando las características espaciales internas del recinto, resulta fundamental considerar al museo como un lugar donde se comparten redes de conocimiento, formas de acceso, códigos y sistemas de lenguaje. Son prácticas con una responsabilidad pública: circular ideas, valores, mitos, estereotipos que inciden en muestra forma de pensar y nuestra forma de modelar la conciencia y por lo tanto, tienen un papel social y cultural clave para entender los cambios en nuestras sociedades.
En el presente apartado se muestra el procedimiento metodológico llevado a cado dentro del proceso de investigación realizado, por lo que se describen a continuación:
Participantes: 10 alumnos por semestre de la carrera de diseño ambiental y de
espacios (2º, 4º, 6º, 8º) teniendo un total de 40 participantes en la investigación.
Universo: Este se conforma por estudiantes de la carrera de Diseño ambiental y de espacios, donde la población se divide en un 90% mujeres y un 10% hombres que van de las edades de 18 a 26 años aproximadamente.
Por lo que cada grupo se dividirá en grupos de nueve mujeres y un hombre, dando un total de 36 mujeres y 4 hombres.
Muestra: Es cualquier subconjunto seleccionado de una población; sigue ciertos criterios de selección establecidos en la teoría del muestreo, la muestra es el elemento básico que permite, posteriormente, realizar la inferencia estadística. (Pierdant, 2012).
Criterios de inclusión: Alumno de diseño ambiental y de espacios que se encuentra actualmente estudiando la carrera.
Criterios de exclusión: Alumno no perteneciente a la carrea de Diseño Ambiental y de Espacios.
Carta de consentimiento informado: Este documento es el componente ético de la investigación, en donde se le explica a los participantes que toda acción y práctica que se llevará a cabo respeta la integridad física, psicológica y moral de los participantes, por lo que no sufrirán daño alguno ni corren riesgo de ningún tipo, así mismo se hace manifiesto que el participante colabora de manera voluntaria existiendo la libertad de retirarse del procedimiento en el momento que así lo decida, sin que esté obligado a rendir explicación sobre la motivación de dicho proceder.
Cuestionario inicial: El cuestionario de inicio tiene como objetivo recabar información esencial del participante, así como también es un modo de sondeo sobre que es lo que piensan a cerca de exposiciones museísticas y su nivel de interés sobre el tema.
Lentes con apuntadores LED: Es un recurso que ofrece una visión aproximada de la observación, al apuntar lo que una persona está viendo, mientras se mueven libremente en cualquier entorno. Ayuda a comprender que es lo que las personas observan y la forma en que interactúan con su entorno, lo que capta su atención, impulsa su comportamiento e influye en la toma de decisiones. (Ver imagen 5).
Arnés de grabación: Con una perspectiva de visión de primera persona el arnés nos ayuda a la observación del movimiento ocular indicado por los lentes con apuntadores LED, lo que nos permite una visión aproximada de que es exactamente lo que el participante está observando a lo largo del recorrido de la sala; así como, determinar distancias aproximadas, puntos de interés y tiempos de observación de las obras. (ver imagen 5).
Imagen 5. Participante con lentes LED y Arnés de grabación. Fotografía: Archivo personal.
Equipo de grabación (observador de 2º orden): Con este quipo se pretende el registro del participante desde una perspectiva exterior, lo que permite observar con detalle el comportamiento que tiene el participante dentro de la sala y así, poder identificar con facilidad los puntos de interés y los recorridos realizados. (Ver imagen 6).
Imagen 6. Proceso de grabación de investigador como observador de segundo orden.
Fotografía: Archivo personal.
Medidor de distancias HER 430: Con la implementación del medidor se pretende registrar a que distancia se coloca el participante en los puntos de interés, para su posterior comparación y análisis.
Encuesta de salida: Después de realizar el recorrido se aplicará una encuesta de salida, la cual contiene preguntas de satisfacción del visitante, para obtener la opinión que tiene a cerca de la exposición museográfica y medir el impacto emocional que causo en el encuestado. (Ver imagen 7).
Imagen 7. Participante llenando encuesta de salida. Fotografía: Archivo personal.
Equipo de registro audiovisual: La función del equipo dentro de la investigación es el registro del proceso de las actividades estipuladas en la encuesta de salida, para observar la toma de decisiones que tiene el participante en la elaboración de un modelo a escala de un espacio.
Diseño de investigación: La investigación comienza con el reclutamiento de voluntarios necesarios para llevar a cabo las pruebas en el museo. Serán 10 alumnos por semestre, 9 de sexo femenino y 1 de sexo masculino, teniendo un total de 40 participantes.
Posteriormente por grupos se trasladarán hacia el MIM, el siguiente paso es registrar su entrada en la recepción para después proceder a contestar la encuesta de inicio. Con esta encuesta se pretende recabar información esencial del alumno para su registro en la investigación sobre recorrido visual en un espacio museográfico que actualmente se está realizando. Así mismo, para poder identificar su experiencia previa antes de entrar a la exposición museográfica.
Terminada la encuesta uno por uno de los participantes realizará el recorrido por la sala utilizando los Lentes con apuntadores LED, con la respectiva calibración por participante.
Terminado el recorrido por la sala cada participante responderá la encuesta de salida. Con esta encuesta se pretende recabar información esencial del alumno para su registro en la investigación sobre el recorrido visual en un espacio museográfico que actualmente se está realizando. Así mismo, para poder identificar su experiencia previa antes de entrar a la exposición museográfica.
Al término del recorrido se solicita al estudiante responder la siguiente serie de preguntas para identificar opiniones, aspectos a mejorar y con ello poder medir las experiencias que el alumno percibe en relación a la exposición museográfica.
Dentro de esta encuesta también se pide al alumno hacer una descripción del
recorrido realizado, con la indicación de que este comience por el final.
Como actividad final se le pide al participante realizar un modelo de un museo o exposición a escala, utilizando los bloques de madera proporcionados. Para su posterior explicación verbal. Todo este proceso será registrado en video y fotografía. Una vez completada esta etapa, el siguiente paso es analizar los datos obtenidos
mediante las herramientas implementadas en el registro de las visitas al museo, de manera que se puedan obtener los datos relacionados con las variables dependientes mencionadas en este documento.
Una vez obtenido las estadísticas ando de las encuestas y la grabación de los recorridos en la sala, se compararán resultados entre cada grupo, para determinar si las hipótesis planteadas en esta investigación son correctas. De igual manera poder hacer recomendaciones con respecto al diseño museográfico que tiene el MIM actualmente y recomendar o mejoras en el diseño del espacio. Así como la coordinación de diseño Ambiental y de Espacios.
El iniciar el recorrido por el interior del museo, lo primero que el espectador/ participante encuentra es el vestíbulo, es un espacio destinado para introducir conceptos claves y fundamentales en relación con la cultura, al patrimonio, tangible e intangible, por lo que este espacio busca la predisposición de los asistentes a que dimensionen el valor y sentido que el museo presenta y cómo dicho accionar es otra forma de contribuir a la formación y reflexión.
Imagen 8. Vista del vestíbulo del MiM. Fotografía: Archivo personal.
Tantas formas de representar el rostro, su propia composición de vista frontal ejerce en el espectador un juego de miradas, la cual requiere un juego de miradas y recorridos en donde la percepción es un ejercicio requerido a través del muro.
En este sentido se puede establecer la necesidad de resaltar el ejercicio de observación de primer, segundo y tercer orden (Luhmann, 1988), de las cuales se pueden extraer conclusiones en distinto nivel, es decir, de acuerdo con cada uno de los registros obtenidos por parte del participante, investigación y de un segundo investigador, en este sentido es pertinente hacer la mención de que la observación de primer orden estará dada por la percepción del espectador/participante, la de
segundo orden, estará dada por la de un primer investigador, quien documenta el hacer y proceder del espectador/participante, y en una observación de tercer orden, existirá un segundo investigador, observando lo que hace el primer investigador en relación al espectador/participante; por lo que este último, podrá observar lo que el espectador/participante y el investigador hacen durante un recorrido por el museo; en conjunto pueden o no establecer diferencias o similitudes tanto a nivel de la vivencia espacial de la exposición.
Imagen 9. Vista de la sala de exposición 1 con participante realizando
su respectivo recorrido. Fotografía: Archivo personal.
Configuración espacial determina la lógica de acceso y circulación en el sitio, por lo que en este caso, el juego desniveles dados por rampas, tanto ascendentes como descendentes, constituyen un aspecto a ser considerado. El recorrido de una sala a otra estaría condicionado por un desplazamiento en una rampa lateral a la sala, dicha rampa está al costado y desciendes a la segunda sala, este recorrido genera una transición o ruptura conceptual sutil, es decir, el trayecto como atmosferas que transforman la percepción que se tiene de una exposición en relación a otra que pueda presentarse en la siguiente sala.
Imagen 10. Vista del trayecto de la sala de exposiciones 1 a la 2. Fotografía: Archivo personal.
La sala de exposiciones 2, comprendió dos exposiciones las cuales las cuales compartían elementos centrales como el concepto de los reflejos, los cuales podrían evidenciarse en la incorporación de pequeños espejos dispuestos a diversas alturas, provocando un juego de observaciones, el cual sirvió como analogía sobre la obra pictórica que se encontraba expuesta, es decir, el juego de observación establecido por los espectadores/participantes al verse en los espejos emulaba la acción imperante en la obra, perpetuando la idea de ser iguales a través del tiempo.
Imagen 11. Vista de la sala de exposición 2 con participante realizando su respectivo recorrido.
Fotografía: Archivo personal.
Una vez que los espectadores/participantes realizaron el recorrido por las salas
de exposiciones 1 y 2, se les solicitó que realizaran la encuesta final, la cual buscaba
recabar información respecto de la vivencia ocurrida en su recorrido, del mismo modo, este momento constituyó un momento de transición a la etapa de conceptualización del espacio museístico ideal.
Imagen 12. Vista de participante contestando encuesta final. Fotografía: Archivo personal.
La valoración museográfica estará dada más por la enunciación de la experiencia, así como de su vivencia comportamental, es decir, las acciones, actitudes, formas y maneras que el participante expresa en su estancia en el museo, de ahí la necesidad de hacer un registro sistemático de su proceder en el sitio, de lo anterior valdría decir que la valoración que se pueda dar mediante encuestas no es suficiente. Por ello es que se les solicitó a los participantes que configuraran su espacio museístico ideal.
Imagen 13. Propuesta de espacio museístico propuesto
por participante. Fotografía: Archivo personal.
Para la obtención de resultados se tuvieron que proponer, adaptar e integrar diversas herramientas de investigación, como lo fueron el uso de unos lentes que pudieran indicar mediante apuntadores laser el área de fijación de la mirada; el uso de cámaras de video como forma de seguimiento ocular y del recorrido realizado en cada caso; el registro y transectos realizados; el registro y medición de las distancias promedio de cada participante y el uso de figuras volumétricas de madera, las cuales fungieron como “muletillas conceptuales”, mismas que sirvieron de apoyo para la explicación conceptual de cada propuesta de sitio; así como el uso de un cuestionario de inicio y término del recorrido.
De la Encuesta de inicio es posible reportar lo siguiente: Primero, en relación a la pregunta 1. ¿Cuándo vas a una exposición qué es lo que esperas de esta? Del total del alumnado indicó en un 22% que desea que la exposición sea de su interés, seguido de que sea una experiencia de aprendizaje, con un 17%. La tercera opción con mayor numero de respuestas, que los logre sorprender y que sea comprensible, ambas opciones cuentan con un 13% de preferencia del total de participantes. Un 10% dice que la exposición tiene que llamarles la atención. Con un 5% cada una los alumnos dijeron que esperan que la exposición cuente con buena información, un buen diseño, que los haga reflexionar y desean apreciar las piezas de la misma. (ver gráfica 1).
Gráfica 1. Resultado general ante la pregunta de ¿Cuándo
vas a una exposición qué esperas de ésta?
Ante la pregunta 2, la cual implicaba que los participantes marcaran el tipo de visitante con el que más se lograban identificar que: de la totalidad de los participantes, un 33% se consideran simplemente curiosos a la hora de visitar un museo, siendo esta la mayoría; seguido por un 32% que respondió que son un turista cultural. Un 23% dice considerarse estudiante/aprendiz, esto es en gran parte a que los participantes aun se encuentran en su etapa escolar. (ver gráfica 2).
Gráfica 2. Resultados generales obtenidos ante el cuestionamiento sobre
el tipo de visitante al museo que se consideran los participantes.
Estas respuestas indican que la tercera parte de los participantes visita un museo dentro de su tiempo libre y por convicción propia, sin la necesidad de que la visita sea un requerimiento escolar dentro de sus asignaturas. Así mismo, esta respuesta se encuentra ligada a la pregunta anterior, puesto que se ve influenciado al tipo de interés que tienen dependiendo que tipo de visitante se consideran.
Ante la sugerencia para mencionar temas que podrían sugerir para una exposición en el futuro, las respuestas fueron: en términos generales un 22% prefiere temas de tipo social, un 20% propuso temas relacionados con el diseño, los temas relacionados con naturaleza y culturas obtuvieron un 10% cada uno. Propuestas de
temas relacionado con fotografía, historia, arte contemporáneo, arte recreativo, cine y música obtuvieron cada uno un 5% de preferencia. Un 3% propuso arte cinético como tema de exposición; un 2% respondió futurismo, por último, un 3% se abstuvo de proponer algún tema. (ver gráfica 3).
Gráfica 3. Resultados generales obtenidos, ante la solicitud
de sugerencias de temas para exposiciones futuras.
En términos generales se puede inferir que: La es respuestas a esta pregunta se vieron fragmentadas, arrojando resultados dispersos y variados debido a la amplitud que genera la forma de cuestionamiento, la cual permite respuestas amplias y poco especificas, pero les da oportunidad expresiva a los participantes. En este sentido, muchos de los encuestados propusieron más de dos opciones; por lo que, para poder graficar y medir dichas respuestas se tomó la primera opción referida en cada caso. (ver gráfica 3).
Los resultados obtenidos en la Encuesta de Salida permitirán contar con información relacionada directamente con las exposiciones que los participantes pudieron apreciar, y se puede establecer que:
Ante la pregunta relacionada con la impresión que les ha dado la visita al museo se puede establecer en términos generales que: En general un 53% de los encuestados cree que la exposición es “buena” y un 47% dice que la exposición es “muy buena”.
Gráfica 4. Resultados generales obtenidos ante la pregunta
sobre la impresión que han tenido sobre la visita al museo.
De este resultado se puede inferir que el total de los participantes tiene una impresión muy favorable de la visita al museo, se puede suponer que dicha respuesta está ligada con la similitud de perfiles que se presenta en esta oportunidad, y ello dificulta contar con otras posibles causas en relación con percepciones personales sobre el museo.
Otro aspecto a considerar en relación con el perfil de los participantes está dado por el lenguaje utilizado para expresar su gusto o preferencia sobre un sitio, es decir, en términos generales se pudo detectar que las respuestas son comunes y son similares (hermosean la exposición, burdamente dicho), aquí entra en juego el nivel de criterio que tiene el participante al momento de evaluar un espacio y su capacidad de analizar la composición del mismo.
Al cuestionar a los participantes acerca de la claridad del recorrido propuesto para la exposición, un 77% de los participantes encuestados dijo entender claramente el recorrido de la exposición, esto, en contraste con un 23% que dijo que no le era claro. (ver gráfica 5).
Gráfica 5. Resultados obtenidos ante el cuestionamiento a los
participantes sobre la claridad del recorrido de la exposición.
Habrá que comparar los recorridos de los participantes, para determinar el por
qué de la afirmación o negación expresada, así como de las razones por las cuáles
fue claro el recorrido den las salas. Cabe destacar que el mismo recorrido implícito en las museografía pude llegar a ser confuso, ya que éste se ideó privilegiando el nivel estético visual, es decir la imagen, ya que las dimensiones de las sala (sala de exposiciones 1) son insuficientes para el tipo de información que se presenta, además del acomodo propuesto, así mismo, en la sala de exposiciones 2, el acomodo de la misma exposición complica el recorrido de forma fluida por la disposición de la obra. De lo anterior se infiere que se habrá de comparar el comportamiento del participante dentro de la sala, sí mismo, relacionar lo qué dice, con lo qué hace en su recorrido (ver registro en video), para poder determinar aspectos de su comportamiento realizado, este ejercicio de observación puede ayudar a determinar las formas implícitas de entender la exposición al tiempo de poder evidenciar las diversas formas de hacer dicho recorrido en las salas de exposiciones 1 y 2.
“Sentir una pintura es, en gran parte, comprenderla.
La inteligencia ocupa un lugar secundario.”
(Cardoza y Aragón, 1988, 31).
Primero: El tipo de comportamiento que presentan los participantes dentro de la sala, depende en gran medida del tipo de visitante que consideran ser, al mismo tiempo, se encuentran ligadas las expectativas y experiencias anteriores que crean en relación a una exposición antes de ingresar a ésta.
Segundo: La necesidad del participante a seguir un recorrido fluido dentro de la sala, por fluido se logra entender que la museografía oriente y direccione al participante dentro de la exposición, a presar de que no siempre sea así, y en algunas ocasiones pueda omitir parte de la exposición.
Tercero: De acuerdo con los resultados obtenidos, y partiendo de la idea de que el rango de edad de los participantes osciló entre los 18 a los 26 años de edad, se puede establecer que criterios de evaluación respecto a las salas de exposición. Por lo que se puede establecer que la edad y por tanto la experiencia influye en el tipo de opiniones que puedan expresar sobre las salas de exposición y la temática expuesta. Cuarto: Las condicionantes arquitectónicas propias del sitio, las dimensiones de elementos característicos o propios de la exposición, así como la correcta lectura de información, son parte del estudio, análisis y propuesta museográfica, ello en su dimensión tanto conceptual como comunicativa, por lo que hay que entender, evaluar y analizar lo que se intenta transmitir al participante en función tanto de la exposición general como de cada sala en particular son claves para propiciar o no
diversos comportamientos.
Quinto: La vivencia es un factor determinante, personal y único, por lo que ello representa una dificultad para obtener una única respuesta. Por lo que se considera que la polaridad en las respuestas a la exposición estará expresada por emociones
/ sentimientos reportados por los participantes y/o visitantes al museo y se podrá
identificar dichas emociones y sentimientos en relación con la museografía en lo
general, (obra), pero también en lo particular, como lo pueden ser las cédulas o fichas
informativas.
Sexto: Puntos de interés dentro de la exposición y el comportamiento del participante en estos. Su acercamiento dependiendo de las dimensiones de la obra.
Séptimo: El nivel de omisión de los detalles de la museografía y el recorrido de la sala por parte de los participantes. Su poca o nula respuesta ante esta situación. Puede ser debido a la mentalidad con la que entra el participante a la sala.
Octavo: La importancia de contar con la mayor cantidad de herramientas de investigación de campo para hacer el registro, el análisis y la interpretación de información, por lo que deberá ser entendida como un proceso de búsqueda, entendimiento y descubrimiento implicado, el cual deberá mostrarse y ser percibido por los espectadores.
Noveno: Uno de los aspectos irrenunciables a los que el diseño se debe es el relacionado con el entendimiento y las interacciones que de él se puedan esperar, necesitar o disfrutar.
Décimo: La importancia de esta investigación radica en aproximarse seria y sistemáticamente con alternativas que contribuyan en la investigación, la reflexión y el análisis vivencial de los espacios, entornos y ambientes, tanto configurados, como próximos a configurar, al tiempo que ello implica asumir explícitamente un compromiso de que toda acción y búsqueda humana mediante el aporte del diseño esté enmarcada en contribuir con el buen vivir.
Arneheim R., (2008). Arte y Percepción Visual, (3ª Ed). España: Alianza Editorial.
Cardoza y Aragón, L., (1988). Ojo/voz. México; Ed. Era.
C.E.I.P San Félix-Candas, (2010). Cuarto de primaria. Curso 2009/2010.
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Pierdant, Rodríguez, (2012). Estadística descriptiva y números índice. México: Universidad Autónoma Metropolitana.
Los autores agradecemos de antemano las facilidades otorgadas por la Dirección y personal del MiM, así como del personal de seguridad, así como a todos los estudiantes de la Licenciatura en Diseño Ambiental y Espacios de la Facultad de Diseño, por la disposición, interés y entusiasmo mostrado en el desarrollo de la investigación, ya que sin la colaboración desinteresada de todos se hubiera podido obtener ningún resultado. Así mismo, los autores agradecen la oportunidad y espacio otorgado para la presentación de este trabajo bajo la modalidad de ponencia dentro del III Congreso Internacional de Filosofía, Arte y Diseño, realizado los días 30-31 de julio y 1-2 de agosto del 2018, en la Escuela de Estudios Generales, Universidad de Costa Rica. A todos, nuestro más profundo y sincero agradecimiento.